Esta asociación fue creada por trabajadoras del hogar y los cuidados. Durante la pandemia han distribuido alimentos y dinero para que las mujeres más vulnerables y sin empleo pudieran pagar sus alquileres y gastos básicos. También apoyan en la distribución de materiales de protección e higiene para que estas mujeres puedan desempeñar su trabajo de forma segura.

Además, para ellas la asociación es una red de apoyo. Se sienten acompañadas, comparten conocimientos, se forman y se ayudan entre sí para realizar trámites por internet.

La asociación está repartiendo bolsas de alimentos (con leche, aceite, verduras, legumbres y otros productos de primera necesidad) a familias migrantes del barrio, afectadas por la crisis que la pandemia ha provocado, la mayoría de ellas en situación muy precaria.

Trabaja también con un equipo de personas intérpretes voluntarias. Su actividad consiste en ofrecer atención telefónica 24 horas para resolver dudas, acompañar en los procesos de enfermedad o realizar el seguimiento de tratamientos médicos de personas que no hablan bien el español.