Inmovilidad social y condena de la pobreza

En el contexto del Foro Económico Mundial de Davos 2019, publicamos nuestros informes en los que denunciamos cómo la desigualdad genera más pobreza en el mundo y también cómo esta afecta al contexto español.

El actual sistema permite que las personas más ricas sigan acumulando amplias fortunas, mientras que cientos de millones de personas luchan cada día para sobrevivir. Una tributación más justa de quienes más tienen puede ayudar a proteger servicios públicos como la salud y la educación, imprescindibles para reducir la brecha entre personas ricas y pobres, y entre mujeres y hombres.

En España, la crisis ha destapado la incapacidad de nuestro sistema de protección social contra la pobreza. La inmovilidad social hace que los ricos y los pobres se perpetúen en el tiempo y en las generaciones. Aquellos con menos renta lo tienen difícil para cambiar su situación a lo largo de su vida: somos el cuarto país de la OCDE donde es más posible seguir estando en el 20% más rico tras cuatro años y las posibilidades de seguir empobrecido superan en 10 puntos la media.