En respuesta a la publicación este lunes del comunicado de los líderes del G20 en Río de Janeiro, la responsable de Justicia Fiscal de Oxfam, Susana Ruiz, ha declarado:
“Aplaudimos el liderazgo de Brasil por lograr que su presidencia del G20 haya sido una oportunidad para aportar soluciones ante las demandas de los pueblos de todo el mundo en la lucha contra la desigualdad extrema, el hambre y el colapso climático. Y destacamos que haya logrado el paso histórico de materializar un consenso global para impulsar una agenda de tributación a los superricos. Brasil ha marcado un camino hacia un mundo más justo y resiliente, a pesar de la resistencia de algunos gobiernos.”
“Hay que reconocer una vez más la determinación colectiva del conjunto de países del G20 por afianzar soluciones que permitan implementar una agenda de tributación a los individuos más ricos. Pero no descansaremos hasta que esto se convierta en un cambio real en la vida de las personas y el planeta. Esto significa desarrollar un estándar global de tributación a los superricos a tipos lo suficientemente altos como generar los billones de dólares necesarios para abordar la crisis climática y la pobreza en el mundo, pero también para lograr una reducción real en la desigualdad.”
“Este hito histórico en la cooperación fiscal internacional también debe estar alineado con los compromisos de los países del G20 en las negociaciones de la COP29 en Bakú, donde el objetivo de financiación climática debería fijarse en 5 billones de dólares. Si no es así, ¿Cómo pueden argumentar que la justicia climática es inalcanzable si estamos poniendo sobre la mesa una vía para lograrlo? Seamos claros: con un acuerdo global para que contribuyan más los más ricos, se podrían recaudar billones de dólares adicionales. “La pelota está ahora en el tejado de Sudáfrica para continuar la lucha contra la desigualdad extrema y hacer realidad el acuerdo de este año para gravar a los superricos de todo el mundo. Este sería un legado verdaderamente histórico de su próxima presidencia del G20.”
En paralelo al acuerdo del G20, la comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados ha vivido hace unas horas una larga jornada de negociaciones de un paquete fiscal que deberá ser aprobado este jueves en el pleno.
El punto de partida era la transposición de la directiva europea que establece un impuesto mínimo del 15% a las multinacionales, pero la inclusión de otras medidas ha quedado en el aire. Sobre ello, Susana Ruiz ha explicado:
“La falta de consenso en la comisión de Hacienda resulta decepcionante y muy preocupante. En los últimos años se habían aprobado medidas en la buena dirección, aunque en su gran mayoría eran temporales y tenían fecha de caducidad.”
“No lograr que los gravámenes especiales a la banca y a las grandes energéticas se conviertan en permanentes es una mala noticia. Desde su activación, han contribuido a mejorar la suficiencia y progresividad del sistema tributario, especialmente de una fiscalidad corporativa que hace aguas por todos lados. También hay que destacar la puesta en marcha del Impuesto temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas que, a pesar de ser un parche transitorio a la necesaria reforma del Impuesto de Patrimonio, ha conseguido subsanar la competencia fiscal a la baja por parte de las Comunidades Autónomas.”
“Resulta muy preocupante la falta de consenso ante la urgencia de reformar el sistema tributario español, de manera que consigamos mayores recursos de una manera más justa. Esta falta de acuerdo nos acerca hacia el precipicio de la austeridad para hacer frente a los compromisos con Europa y nos impide afrontar con garantías algunos de los profundos desafíos que tenemos por delante: la desigualdad, la falta de oportunidades para la gente joven, el creciente envejecimiento de la población o la lucha contra el cambio climático y los estragos que ya está provocando en nuestro país, como desgraciadamente hemos podido comprobar hace tres semanas con la DANA.”
“Es necesaria una mayor implicación y amplitud de miras por parte de todos los partidos políticos en las discusiones del próximo jueves en el pleno del Congreso. No ampliar esos consensos supone una oportunidad perdida y un profundo paso atrás para lograr una fiscalidad justa en España.”
