La crisis socioeconómica causada por la pandemia deja en España una huella desigual e injusta que, a largo plazo, puede ser más grave que la pandemia en sí misma, según se deduce del último informe de la ONG Oxfam Intermón, “Una reconstrucción justa y necesaria es posible”.
La crisis podría arrojar a más de 700.000 personas adicionales en la pobreza, y además, según las estimaciones de la organización, el previsible aumento de la desigualdad supondría borrar de un plumazo la reducción de ésta durante los últimos cuatro años. Las personas con menores ingresos perderían, proporcionalmente, ocho veces más renta que las más ricas, según los cálculos de la ONG.
Frente a esto, Oxfam Intermón propone una recuperación basada en una fiscalidad progresiva, que permitiría recaudar 10.000 millones de euros más para blindar el sector público con el fin de garantizar la salud, la educación y la protección social. Además, la organización propone medidas para paliar la precariedad laboral que afecta especialmente a trabajadoras y trabajadores que en esta pandemia han sido esenciales, muchas de ellas personas migrantes para las que pide también una regularización amplia y extraordinaria.
Desigualdad y pobreza al alza en nuestro país
La desigualdad está aumentando. En términos proporcionales, el decil más pobre de la población podría llegar a perder más de ocho veces la renta que pierde el decil con mayores ingresos. Este impacto dispar supondría un aumento de la desigualdad de la renta neta en 1,7 puntos del índice de Gini, y la reversión de cuatro años consecutivos de tímida reducción de la desigualdad.
También aumenta la pobreza. Teniendo en cuenta las estimaciones de caída del PIB en un 9% y el aumento del desempleo hasta el 19%, Oxfam Intermón pronostica que el número de personas pobres en España puede aumentar en más de 700.000 personas, hasta alcanzar los 10,8 millones. El porcentaje de 21,5% antes de la Covid19 pasaría al 23,1% de la población tras los efectos de la pandemia.
En contraste, según datos de la organización, los 23 milmillonarios españoles han visto aumentar el valor de su riqueza en 19.200 millones de euros en los 79 días transcurridos entre el 18 de marzo y el 4 de junio. Una realidad que contrasta con la de miles de familias que enfrentan un futuro incierto con muy pocos recursos.
Las comunidades autónomas que registran un mayor incremento porcentual de la pobreza son Baleares, Castilla León, Aragón y Catalunya. En términos absolutos es en Andalucía donde más personas pasarían a estar en situación de pobreza, con 201.000 personas más. En cuanto a desigualdad, la comunidad con un mayor aumento de esta es Andalucía, seguida por Canarias y Extremadura.
Trabajadoras y trabajadores precarios
En apenas 22 días, 900.000 personas se dieron de baja en la seguridad social por la paralización de la actividad económica, con especial afectación en sectores como la construcción o la hostelería en los que el 73% de personas corresponde a grupos de cotización bajos, con mayor presencia de mujeres, jóvenes y personas de baja cualificación.
En el caso de la población migrante, su tasa de desempleo en 2020 podría quedar diez puntos por encima de la de las personas nacidas en España. Su probabilidad de perder el empleo según las estimaciones de la organización es de un 145% sobre la población de nacionalidad española. Oxfam Intermón también calcula que el impacto de la Covid19 puede hacer que una de cada tres personas por debajo del umbral de la pobreza sea una persona migrante.
En cuanto a las mujeres, la ONG recuerda que de cada diez personas que reciben salarios mínimos interprofesionales, siete son mujeres, y que casi la mitad (46,27%) de los contratos firmados por mujeres el año pasado fueron contratos parciales.
“Hay personas que están en la primea línea de la respuesta sanitaria y social que tienen sueldos bajos y condiciones laborales a menudo precarias”, dice Lara Contreras, responsable de investigaciones e incidencia de Oxfam Intermón.
“Tenemos que garantizar los derechos de quienes han garantizado nuestra supervivencia, personas que han resultado imprescindibles frente a un modelo económico que hasta ahora les había dado la espalda: profesionales sanitarios, mensajeros, riders o falsos autónomos, cajeras de supermercados o trabajadores agrarios. Muchas de ellas personas migrantes, como las trabajadoras que han cuidado de nuestras ancianas y ancianos: una de cada tres vive bajo el umbral de la pobreza y sólo una cuarta parte está registrada en la Seguridad Social”.
Propuesta para evitar el aumento de la desigualdad en España
Oxfam Intermón considera que la reconstrucción no puede dejar de nuevo de lado a estos trabajadores y trabajadoras esenciales. Por ello propone varias medidas para reducir la precariedad laboral: desde reformas estructurales que den mayor peso a sectores de más valor añadido hasta procedimientos de contratación por parte de las administraciones públicas que eviten la temporalidad y controlen las condiciones de subcontratación.
También el incremento de la inversión pública en el sector de los cuidados como residencias de personas mayores y la incorporación de las trabajadoras del hogar y cuidados al régimen general de la seguridad social.
Específicamente para las y los trabajadores migrantes, la ONG defiende un proceso de regularización administrativa amplio y extraordinario, que se incremente el acceso al permiso de trabajo y residencia, así como garantizar el acceso al Ingreso Mínimo Vital de los grupos en situación más vulnerable, como solicitantes de asilo o familias con niños y niñas, independientemente de su situación administrativa.
Todo esto, según Oxfam Intermón, no puede hacerse con una recaudación fiscal que sigue estando cuatro puntos por debajo de la media de la Unión Europea. Por ello, la organización propone medidas fiscales tanto extraordinarias como estructurales, que supondrían unos ingresos de al menos 10.000 millones de euros adicionales. Entre las extraordinarias, figuran entre otras un impuesto temporal sobre los beneficios extraordinarios, un impuesto a las transacciones financieras más ambicioso que el que ahora mismo se debate en el Congreso y que las ayudas públicas a las empresas estén condicionadas a un comportamiento fiscal responsable.
Como medidas fiscales estructurales, Oxfam Intermón propone reformar el impuesto al patrimonio para que cumpla su función redistributiva, aumentar la presión fiscal sobre las rentas del capital en el IRPF (infragravadas frente a las rentas del trabajo) o eliminar ciertos ajustes extracontables con el objetivo de aumentar el tipo efectivo del Impuesto de Sociedades, para que sea de al menos el 15% por parte de las grandes empresas.
Por último, la organización también recuerda que, como anunció al inicio de la pandemia, a nivel mundial, la Covid19 podría incrementar en 500 millones el número de personas en la pobreza, por lo que exige compromisos de los países donantes, incluyendo España, a una escala nunca vista para desarrollar un plan mundial de salud pública y otro de rescate económico universal.
Notas para la edición:
Periodista - Departamento de Comunicación
Oxfam Intermón es miembro de la confederación internacional Oxfam.